¿Qué hacer en valencia?: itinerario de 3 días

Valencia es la tercera ciudad más grande de España y está conformada por numerosos monumentos históricos, modernos edificios y playas paradisíacas. Además de la paella, esta ciudad con vistas al mar Mediterráneo tiene muchos atractivos turísticos, como pasear por su bello casco histórico, admirar los deslumbrantes interiores de las iglesias o visitar museos que rememoran el pasado aristocrático de esta ciudad. 

A continuación, presentamos las mejores cosas que hacer y ver en Valencia en 3 días. En este itinerario hablamos de las atracciones turísticas valencianas más famosas sin olvidarnos de recomendaciones de dónde comer y alojarse para que esta visita sea perfecta.



Día 1

Mañana: primera parada en la Estación del Norte

La Estación del Norte en Valencia es una parada obligatoria, aunque no se vaya a coger ningún tren allí. Esta estación modernista de principios del siglo XX fue diseñada por el valenciano Demetrio Ribes que se inspiró en la combinación de líneas rectas y formas curvas propias del movimiento de Secesión vienés. Las paredes amarillas y los símbolos valencianos como las naranjas, las flores de azahar y algunos otros motivos agrícolas destacan sobre la fachada de esta estación. Por otro lado, el interior es igual de impresionante gracias a las paredes de azulejos y a la cubierta principal de la nave central que tiene forma de arco y que contiene guías de hierro que representan las mismas vías del tren que cubre esta bóveda.



Plaza del Ayuntamiento

Desde la estación ferroviaria se puede llegar directamente a la Plaza del Ayuntamiento, la plaza más grande de la ciudad que, además, está rodeada de numerosos edificios de gran relevancia histórica, como son el ayuntamiento y el Palacio de Correos. Además, en la plaza también hay algunas floristerías y una fuente que se ilumina por la noche. La Plaza del Ayuntamiento es uno de los puntos neurálgicos de Valencia, por lo que siempre tiene mucho ambiente, especialmente durante las Fallas, ya que todo el mundo se reúne aquí para ver cómo arde el último monumento fallero.



Mercado Central

Esta ruta turística continúa en el Mercado Central, la impresionante plaza de abastos valenciana que se sitúa en un edificio modernista aún más impresionante. Este mercado de unos 8000 metros cuadrados tiene puestos de lo más variados en sus dos plantas. El diseño interior del Mercado Central combina una gran cantidad de materiales, de entre los que destacan el hierro, los azulejos y las vidrieras. En relación a la comida, este mercado tiene más de 1000 puestos que venden desde fruta y verdura fresca hasta especias de lo más variadas y todo tipo de pescado y marisco. Además, pararse a descansar en el Central Bar y probar las tapas y los sándwiches hechos con ingredientes locales es muy recomendable.



Iglesia de los Santos Juanes o església de Sant Joan del Mercat en valenciano

Justo al lado del mercado se encuentra la iglesia de los Santos Juanes, que ocupa el lugar en el que previamente estaba una mezquita del siglo XIII. Esta iglesia tuvo que ser reconstruida tras dos incendios que sufrió en los siglos XIV y XVI, razón por la que la fachada actual es del siglo XVII y de estilo mayoritariamente barroco. Destacan la escultura de la Virgen del Rosario, la torre del reloj y la veleta, conocida como el pájaro de San Juan.



La Lonja de la Seda o Llotja de la Seda en valenciano

La Lonja de la Seda, o Lonja de los Mercaderes, es uno de los lugares más destacados de Valencia. Además, esta obra maestra del gótico civil valenciano, que solía ser un lugar de compra y venta de seda pero que ahora está abierta al público, fue declarada en 1996 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Fue el arquitecto valenciano Pere Compte el que dirigió la construcción de este emblemático lugar entre los años 1482 y 1492 y, tras su muerte, fue relevado por uno de sus aprendices. Este edificio es de estilo mayoritariamente gótico, pero contiene algunos elementos del Renacimiento. En relación a su exterior, sus paredes de estilo parecido a las de una fortaleza le dan a la Lonja de la Seda un aire parecido al de un castillo medieval al que merece mucho la pena entrar para observar las columnas helicoidales de la Sala de Contratación o pasear por el patio de naranjos.



Catedral de Valencia

La siguiente parada obligatoria es la catedral valenciana que, junto con su torre campanario, se ha convertido en un icono de Valencia. Su construcción comenzó en el siglo XIII y, como su construcción concluyó en el siglo XVII, esta catedral incluye una gran variedad de elementos de estilos arquitectónicos distintos además de sus elementos góticos originales. La Puerta del Palau, también conocida como Puerta de la Almoina, de estilo románico y mudéjar, es una de las puertas de acceso a esta bella catedral.


No hay que irse de la catedral sin visitar la pequeña Capilla del Santo Cáliz decorada con los doce apóstoles. El nombre de esta capilla se debe a que en el interior se encuentra el famoso Santo Grial, una copa que data del siglo I d.C. y que se dice que fue utilizada durante la Última Cena. Antes de irse también es recomendable subir a la torre campanario, conocida como El Miguelete o El Micalet en valenciano, para disfrutar de una vista panorámica de la ciudad.



Plaza de la Virgen

Frente a la parte trasera de la catedral se encuentra la Plaza de la Virgen, una pintoresca plaza que en su día era un foro romano. Actualmente esta plaza alberga bulliciosas cafeterías y llamativos edificios como la Basílica de la Virgen de los Desamparados y el Palacio de la Generalitat, sede del gobierno valenciano. Además, todos los jueves por la tarde se reúne el Tribunal del Agua en frente de la Puerta de los Apóstoles de la catedral. Este tribunal se remonta a la época medieval y es la institución judicial más antigua de Europa, además de ser Patrimonio Cultural de la Unesco. Por último, en el centro de la plaza hay una fuente que representa el río Turia.



Mañana - Mapa de la ruta turística por Valencia


Tarde: primera parada en el Barrio del Carmen (casco antiguo)

La tarde comienza explorando el Barrio del Carmen, barrio que antaño estaba rodeado por paredes medievales. De esa época solo se mantienen algunos elementos como las torres Serranos y Quart. Más allá de estas dos entradas se abre un entramado de laberínticas y empedradas calles con iglesias y plazas con mucho encanto, entre las que destacan la Plaza del Carmen, la Plaza del Árbol y la Plaza del Tossal, plaza que se llena de vida por la noche.


Es importante visitar también el Portal de Valldigna, un arco del siglo XV que en el pasado servía como entrada al barrio árabe. Con estos lugares de gran relevancia histórica contrasta el arte callejero y los museos contemporáneos como el MuVIM (Museo Valenciano de la Ilustración y Modernidad) y el IVAM (Instituto Valenciano de Arte Moderno).



Iglesia de San Nicolás

La iglesia de San Nicolás, que data de 1242, es una de las primeras iglesias cristianas en Valencia. A lo largo de los años ha ido atravesando diversos cambios que han resultado en una mezcla de elementos arquitectónicos, desde su bóveda de estilo gótico hasta sus retablos renacentistas. Sin embargo, la joya de la corona son las pinturas al fresco de estilo barroco en el techo. Es imposible no maravillarse ante los ostentosos diseños que representan escenas de la vida de San Nicolás de Bari y de San Pedro Mártir.



Plaza de la Reina

Desde la iglesia a la pintoresca Plaza de la Reina hay un paseo corto pero que merece la pena hacer para probar la horchata en uno de los muchos restaurantes y cafeterías que aquí se encuentran, como la Horchatería Santa Catalina. Desde este lugar se puede vislumbrar la catedral y su icónica torre. Además, cerca de esta plaza se encuentra otra de gran importancia llamada la Plaza de Santa Catalina, donde se encuentra una iglesia homónima de estilo gótico.



Museo Nacional de Cerámica

El Museo Nacional de Cerámica, que contiene una de las colecciones de cerámica más grandes de España, se encuentra dentro de un palacio del siglo XVIII que destaca por sus elementos del Barroco. Su colección va desde el siglo XVIII hasta la época moderna y, es gracias a las donaciones de obras, incluyendo algunas de Picasso, del artista e historiador Manuel González Martí, que el museo cuenta con una exposición tan amplia.



Plaza Redonda

Si bien es cierto que Valencia cuenta con numerosas plazas, la Plaza Redonda es, sin lugar a dudas, única. Su nombre viene de su estructura circular diseñada por Salvador Escrig Melchor en 1840. En 2012 esta plaza fue restaurada y ahora es una de las atracciones turísticas más famosas, entre otras cosas, porque cuatro calles convergen en esta plaza rodeada de edificios residenciales. Además, en ella se encuentran numerosos bares de tapas y tiendas de artesanía y una fuente en el centro desde la que se puede vislumbrar la torre de Santa Catalina. Cerca se encuentra la Plaza de Lope de Vega, donde se encuentra uno de los edificios más estrechos del mundo, con apenas un metro de ancho.



Mapa de la ruta turística por Valencia


Día 2

Mañana: primera parada en el Jardín del Turia

Para comenzar el segundo día nada mejor que explorar el Jardín del Turia, uno de los parques urbanos más grandes de España con 9 kilómetros de largo. En el interior del parque hay numerosos senderos, puentes, cafeterías y zonas pensadas para hacer deporte como correr o ciclismo. Este espacio verde fue creado en el siglo XX sobre el cauce del río Turia, y esto fue posible debido a la devastadora inundación del mismo río en 1957, que provocó que el curso del río se desviara dejando un gran terreno vacío que fue usado por paisajistas y urbanistas para crear el parque tal y como los valencianos lo conocen hoy en día, con fuentes, rosales y naranjos. En este parque también hay otras atracciones turísticas muy importantes como el Palau de la Música y la Ciudad de las Artes y las Ciencias, de la que hablaremos en breve.



Mercado de Colón

Desviarse un poco para visitar algunos de los mercados de la ciudad antes de ir a la Ciudad de las Artes y las Ciencias es muy recomendable. En el barrio del Ensanche, Eixample en valenciano, se encuentra el Mercado de Colón, que se fundó en 1916. Dentro de este mercado se puede degustar una serie de productos tradicionales como la horchata, además de visitar restaurantes o atender a eventos culinarios. La estructura modernista de este mercado fue ideada por el arquitecto Francisco Mora Berenguer, que incluyó algunos elementos que evocan los diseños de Gaudí. Finalmente, este mercado fue renovado en 2003, lo que supuso la incorporación de nuevas tiendas.



Ruzafa

Cerca del Eixample se encuentra el barrio de Ruzafa, que, en los últimos años, se ha convertido en un punto de atracción para los artistas locales. En Ruzafa se encuentran galerías de arte indie, tiendas de segunda mano y numerosos locales para ir de tapas o de copas. Además, en este barrio también es imprescindible visitar el Mercado de Ruzafa, que vende productos frescos y embutidos.



La Ciudad de las Artes y las Ciencias o Ciutat de les Arts i les Ciències en valenciano

La futurista Ciudad de las Artes y las Ciencias provoca un claro contraste con los emblemáticos monumentos históricos valencianos. Este complejo formado por seis atracciones de distintas formas y estructuras fue diseñado por los arquitectos Félix Candela y Santiago Calatrava. En primer lugar, está el Umbracle, un paseo bordeado de árboles; en segundo lugar, el Hemisfèric, que es tanto un planetario como una sala de proyecciones digital 3D; y, en tercer lugar, el Museu de les Ciències Príncipe Felipe, un museo de ciencia interactivo. Por otro lado, el Palau de les Arts Reina Sofía acoge numerosas óperas, mientras que el Ágora es un espacio polivalente que acoge diversos eventos. Por último, está el Oceanogràfic, el mayor acuario de España. Es fácil distinguir el edificio por su estructura blanca y curvada y su fachada de espejo. Aquí hay cerca de 500 especies marinas, desde delfines hasta leones marinos y tiburones. Es necesario pagar entrada para entrar en estos edificios, pero, si se prefiere no pagar, también se puede pasear por los jardines y admirar la arquitectura a su paso.



Tarde: visita a las playas de Valencia

Por la tarde, nada mejor que montarse en un autobús o en una bicicleta e ir a una de las playas de Valencia. La más cercana al centro de esta ciudad es la playa del Cabanyal y, desde ahí, se puede pasear por la costa hasta descubrir más playas como la Malvarrosa y la Patacona. En el paseo marítimo que acompaña a todas estas playas hay muchos restaurantes y bares donde se puede parar para beber algo o probar la famosa paella.



Marina

Un buen plan para terminar la tarde es visitar la Marina de Valencia, el antiguo puerto de la ciudad que es ahora un espacio público perfecto para admirar las vistas al mar y a los barcos pesqueros desde las terrazas de los bares. Además, muchas excursiones en barco salen desde aquí, incluyendo el ferry a Ibiza y a Palma de Mallorca. Por último, es importante no olvidarse de visitar el edificio del Reloj con su preciosa fachada modernista.



Día 2 - Mapa de la ruta turística por Valencia


Día 3

Mañana: primera parada en el Jardín de Monforte

Después de dos días de mucho ajetreo haciendo turismo, toca descansar un poco visitando algunos de los parques y jardines más emblemáticos de Valencia. La primera parada es el Jardín de Monforte que, entre árboles y arbustos decorativos, esconde bonitos caminos, esculturas y fuentes. Fue en 1849 cuando el marqués de San Juan compró esta propiedad y contrató al arquitecto Sebastián Monleón Estellés para que diseñara los jardines, que se mantienen prácticamente iguales desde entonces. Además, dentro del jardín hay una mansión de estilo rococó rodeada por buganvillas que florecen en primavera, la mejor época para visitar este jardín.



Jardines del Real

Pasear por estos jardines que en el pasado formaban parte del recinto del Palacio Real es el plan perfecto. Estos jardines también son conocidos por los valencianos como Los Viveros, ya que antes solían albergar un vivero de árboles. Actualmente, estos jardines que están conformados por palmeras, arbustos podados en forma espiral, esculturas y fuentes dan forma a un entorno de verdadero encanto. Por otro lado, estos jardines también dan acceso al Museo Municipal de Ciencias Naturales y al Museo de Bellas Artes y, en verano, se llenan de vida gracias a eventos como conciertos o a la feria del libro.



Museo de Bellas Artes

Una vez en los Jardines del Real, el Museo de Bellas Artes es merecedor de una visita, ya que contiene una de las galerías de arte más extensas en España. Antes de que se convirtiera en un museo en 1946, este edificio de estilo barroco tenía diferentes funciones, desde servir como una facultad, hasta ser una academia militar y un centro de beneficencia. Actualmente, los visitantes se quedan atónitos ante la colección de arte que este museo alberga de entre el siglo XV y el siglo XIX. Cabe destacar que muchas de las obras son de artistas valencianos como Joaquín Sorolla, Vicente López y Juan de Joanes. Por otro lado, también hay obras de otros artistas como Goya, Velázquez y Van Dyck. Una vez fuera del museo, recomendamos no perderse el bonito patio del embajador Vich que data del siglo XVI.



Parque de Cabecera

Desde el anterior museo se puede ir andando o en autobús al Parque de Cabecera, que incluye numerosas atracciones turísticas como un auditorio al aire libre, un lago con barcas que se pueden alquilar y el Bioparc, el zoo de la ciudad. En el Bioparc hay casi 250 especies distintas de animales, mayoritariamente de África, entre las que se incluyen los elefantes, los rinocerontes, los hipopótamos y las avestruces.



Tarde: visita al Parque Natural de l’Albufera

Para pasar la tarde nada mejor que relajarse en una de las playas de la ciudad o, si se tiene energía, coger un autobús al Parque Natural de l’Albufera. Entre bosques y arrozales esta zona es un retiro natural donde se puede probar una verdadera paella en la localidad de El Palmar. Después, se puede caminar por uno de los muchos senderos o alquilar una barca y navegar por el gran lago. Además, hay algunas playas en la costa como la playa de la Devesa, donde merece pena sentarse hasta el atardecer y disfrutar de una de las mejores vistas de Valencia.



Otras cosas que hacer en Valencia

  • Museo del Patriarca: este museo se encuentra en el casco antiguo de la ciudad y es uno de los edificios renacentistas más emblemáticos de Valencia. El Museo del Patriarca exhibe mayoritariamente obras religiosas de artistas como Caravaggio, El Greco y Pinazo, además de algunos artistas flamencos.


  • Instituto Valenciano de Arte Moderno: abierto desde 1989, el IVAM es uno de los museos más antiguos de arte moderno en España, cuya colección permanente se centra en el arte del siglo XX. Además, este centro incluye obras de artistas valencianos, pero también internacionales. Entre las obras más destacadas se encuentran las esculturas de Julio González y los cuadros de Ignacio Pinazo.


  • Jardín Botánico: A tan solo unos minutos del IVAM se encuentra el Jardín Botánico de Valencia. Este jardín alberga casi 3000 especies distintas de plantas, incluyendo cactus, arbustos de origen tropical y palmeras. El Jardín Botánico forma parte de la Universidad de Valencia y se sigue utilizando para estudiar la flora que allí se encuentra.


  • Museo Arqueológico de la Almoina: este museo alberga una serie de hallazgos arqueológicos ligados a las civilizaciones pasadas de la ciudad. Las principales atracciones son las bien conservadas termas romanas y el patio musulmán.


  • La plaza de toros de Valencia: como la mayor parte de las ciudades españolas, Valencia también tiene una plaza de toros. Esta plaza de toros se fundó entre 1850 y 1860 y la estructura tiene cierto parecido al Coliseo romano por su forma circular. Su diseño neoclásico fue ideado por el arquitecto valenciano Sebastián Monleón Estellés.


  • Museo Fallero: este museo es perfecto para aquellos que no puedan ir a las Fallas en marzo. Dentro se encuentran los coloridos monumentos falleros que, en cada desfile desde 1934, se salvan de ser quemados para que puedan ser expuestos en este museo.


  • Playa El Saler: esta playa se encuentra a tan solo unos pocos kilómetros al norte del Parque Natural de l’Albufera. Esta playa se encuentra en un bellísimo entorno de dunas y pinos donde se puede hacer un picnic o ir a alguna de sus marisquerías después de darse un baño en sus cristalinas aguas.



Excursiones de un día desde Valencia

  • Requena: este pueblo se encuentra a una hora al oeste de Valencia y, pese a que la mayor parte de la gente visita esta localidad por sus bodegas, Requena tiene también mucha historia. Entre sus principales atracciones turísticas están el Colegio del Arte Mayor, recordatorio de la época de apogeo de la producción de seda en Requena, iglesias de estilo gótico y monumentos medievales como la Alcazaba o la Torre del Homenaje.


  • Sierra Calderona: este parque natural de grandes dimensiones se encuentra entre las provincias de Valencia y Castellón. El paisaje de esta zona se caracteriza por la abundancia de pinos rodenos y de robles. Los visitantes pueden realizar algunos de sus senderos que pasan entre las montañas o visitar las torres medievales en la localidad de Serra.

  • Sagunto: a lo largo de los años, Sagunto ha sido ocupada por numerosas civilizaciones. Por un lado, los romanos, que la nombraron Saguntum, dejaron su huella en sitios como el Teatro Romano. Por otro lado, con vistas a esta población hay una torre de origen musulmán que conserva hallazgos de origen romano e íbero. Además, otros sitios que merecen la pena visitar son el barrio judío, la iglesia gótica de Santa María y el ayuntamiento. También merecen una visita algunas de las playas que se encuentran cerca del puerto de la región.


  • Peñíscola: esta ciudad, perteneciente a la provincia de Castellón, atrae a sus turistas gracias a sus playas de arena blanca y a sus lugares de gran relevancia histórica, entre los que destacan el castillo del siglo XIII que se yergue sobre la costa mirando al Mediterráneo. Además, la localidad de Peñíscola suele acoger eventos que atraen a muchas personas durante todo el año y también ha servido de escenario para Juego de Tronos. Cerca de Peñíscola se encuentra el Parque Natural de la Sierra de Irta, perfecta para los amantes del senderismo o del mountain bike.


  • Albarracín: este pueblo ubicado entre las colinas fue un reino taifa durante el período andalusí. Sus paredes medievales se extienden más allá del centro de la población e incluyen enclaves como la Torre del Andador. Merece la pena perderse por el casco antiguo mientras se visitan lugares como la Plaza Mayor o la Catedral del Salvador, del siglo XVI.
  • Xàtiva: Para llegar a esta localidad basta con coger un tren desde Valencia. En Xàtiva hay numerosos lugares emblemáticos como las iglesias y las fuentes que van desde la época del Renacimiento hasta la del Barroco. La joya de la corona es, sin embargo, su gran castillo, que combina elementos iberorrománicos y árabes y que se caracteriza por sus 30 torres y sus cuatro entradas.



Las mejores cosas que hacer con niños en Valencia

Valencia es un destino ideal para las familias ya que hay muchas actividades para niños en la ciudad, tanto en el interior como al aire libre. En verano, ir a la playa es una opción clara, y tanto las playas cercanas de la Patacona o de la Malvarrosa como las más alejadas como la de El Saler, son perfectas para que los niños disfruten. 

Por otro lado, si se prefiere explorar a fondo la ciudad, las mejores opciones son los parques, ya que todos tienen al menos un área de recreo infantil. Visitar el Parque Gulliver es una parada obligatoria si se tiene niños ya que tiene numerosos toboganes y túneles que rodean a una estatua gigantesca de Gulliver.


A los niños también les encanta el Bioparc, un zoo parecido a una sabana que se encuentra en el Parque de Cabecera.


Además, se pueden alquilar hidropedales en el lago del parque o canoas cerca de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Además, cerca de esa zona se encuentra el Oceanogràfic, un acuario donde los niños podrán observar una gran variedad de especies de animales marinos como delfines, pingüinos y tiburones. Por otro lado, también están el museo de ciencias y la sala de proyecciones de tecnología 3D de los que hablamos previamente.


Por otro lado, para los que sean fans de Lego, les recomendamos que visiten la Lego Fun Factory en el centro comercial Aqua. Este lugar de 250 metros de extensión contiene áreas separadas adaptadas para que los niños y los más mayores disfruten con esta experiencia Lego.


En general, la ciudad no tiene muchas cuestas, sino que es bastante plana, por lo que se puede caminar a cualquier sitio o alquilar una bicicleta y pedalear por los parques y paseos sin ninguna dificultad.



Dónde comer en Valencia

La mayor parte de los platos valencianos giran en torno al arroz ya que, al fin y al cabo, Valencia es la cuna de la paella. Encontrar este plato en los restaurantes de la ciudad es bastante sencillo, especialmente en los restaurantes del paseo marítimo. Otros platos típicos con arroz son el arros al forn, un plato de arroz al horno mezclado con salchichas, patatas, tomates y guisantes. De postre nada mejor que probar los fartons, una especie de bollo alargado hecho de leche, azúcar y huevos. 

Por otro lado, también hay bebidas típicas como el Agua de Valencia, un cocktail hecho de zumo de naranja, vodka, ginebra y cava, o la horchata, una bebida que se parece a la leche hecha de chufa. A continuación, presentamos los mejores mercados locales, restaurantes con paella y elegantes sitios para cenar: 

Mercado Central: para probar la cocina valenciana, nada mejor que visitar el Mercado Central. Este mercado de comida local tiene una gran variedad de puestos que venden de todo, desde jamón ibérico hasta marisco y productos de pastelería y panadería. Además de los productos frescos, también hay un bar a cargo del chef Ricard Camarena que sirve tapas deliciosas como los buñuelos de bacalao.



Bares de tapas y restaurantes de comida tradicional

  • Café de las Horas: esta cafetería en el casco antiguo de la ciudad es uno de los mejores lugares para probar el cocktail valenciano por excelencia, el Agua de Valencia. Además, esta cafetería está decorada con mucho gusto con decoración de estilo victoriano, cortinas rojas, lámparas de araña y un techo con dibujos de estrellas.


  • La Pepica: a tan solo unos pasos de la playa, se encuentra este restaurante centenario. Durante años, la gente ha venido aquí a probar sus paellas, ya que sus porciones son enormes, por lo que venir acompañados es esencial.


  • Gallina Negra: este innovador restaurante con paredes decoradas de arte urbano no podía estar en otro sitio que en el barrio de El Carmen. Los chefs de este restaurante se formaron junto con Ricard Camarena, hasta que éste decidió abrir un restaurante por su cuenta. En el menú hay numerosos platos muy originales con influencias mediterráneas, asiáticas y latinoamericanas.


  • Casa Montaña: fundada en 1836, esta taberna es famosa por su colección de tapas y vinos. Entre los platos más destacados están las habas y las anchoas.


  • Palace Fesol: este restaurante valenciano se encuentra cerca del Mercado de Colón. El menú presenta numerosos platos típicos de la cocina valenciana como el all i pebre (una salsa típica para cocinar pescado) y una gran variedad de platos de arroz.



Restaurantes para cenas elegantes

  • Ricard Camarena: este restaurante a cargo del famoso chef valenciano Ricard Camarena ha ganado dos estrellas Michelin y una estrella verde por sus técnicas sostenibles. Los menús degustación se caracterizan por sus influencias mediterráneas y varían de acuerdo con las estaciones del año.


  • El Poblet: este restaurante de una estrella Michelin se encuentra a tan solo unos pasos de la Plaza del Ayuntamiento. El chef Quique Dacosta ha elaborado su menú en torno a ingredientes valencianos, en su mayoría procedentes de los mercados locales. Además, los clientes pueden elegir uno de los menús de degustación establecidos o crear el suyo propio.



Dónde alojarse en Valencia

  • Hotel Caro (5 estrellas): este hotel de cinco estrellas que ocupa el lugar de un antiguo palacio está a tan solo unos pasos de las principales atracciones turísticas de Valencia, como la catedral y la Lonja. El edificio se caracteriza por sus muros de estilo gótico y su sótano romano. Durante la estancia, los clientes pueden disfrutar de un baño en la piscina exterior y de una cena deliciosa en el restaurante del hotel.


  • Hotel Hospes Palau de la Mar (5 estrellas): este lujoso hotel está muy cerca del Jardín del Turia. Todas sus habitaciones son modernas y tienen pequeños balcones. Entre sus instalaciones se encuentran: un restaurante, un bar, un patio con jardín y un spa con jacuzzi y sauna.

  • Hotel Vincci Mercat (4 estrellas): este hotel que se encuentra en el casco antiguo de la ciudad cuenta con 68 habitaciones. Además, este hotel ofrece a sus clientes la posibilidad de darse un baño en su piscina en la azotea con vistas a la ciudad o relajarse bebiendo algo en su bar.

  • City Garden B&B (3 estrellas): este Bed and Breakfast se encuentra en el moderno barrio de Ruzafa. Todas sus habitaciones tienen vistas a la calle o un balcón con sillas para descansar. Hay también un bonito patio rodeado de plantas.



¿Cuál es la mejor época para visitar Valencia?

La mejor época para visitar Valencia es durante la primavera, entre abril y mayo, porque se puede empezar a disfrutar del clima cálido, propio de esta época del año, pero sin encontrarse con las aglomeraciones de turistas en verano. Además, dado que Valencia tiene clima mediterráneo, cualquier momento entre primavera y verano es perfecto para disfrutar de sus playas bañándose. Asimismo, durante estas fechas también se celebran numerosas fiestas locales, así que planear esta visita teniendo en cuenta cuándo se celebran algunas de estas celebraciones también sería ideal. En relación al clima, es prácticamente el mismo durante todo el año. En invierno puede que haya sitios que cierren antes, pero, por otro lado, también habrá muchos menos turistas. Febrero es, por ejemplo, el mes ideal para ver los almendros y los naranjos en flor.



Fiestas en Valencia

  • Semana Santa: alrededor del mes de abril llega la Semana Santa a España y Valencia no es ninguna excepción. Durante esta celebración hay numerosos actos religiosos, sobre todo en torno al paseo marítimo. Cabe destacar la procesión del Santo Entierro, la procesión de las Palmas y el desfile de la Resurrección.


  • Las Fallas: esta fiesta, que comienza el 1 de marzo en la Plaza del Ayuntamiento con sonido de los petardos, es una de las celebraciones más alocadas, no solo de Valencia, sino de toda España. Sin embargo, la mayor parte de las actividades tienen lugar durante la segunda semana de marzo. Como cada año, los artistas locales se unen para crear las fallas o monumentos falleros, que son gigantescas figuras hechas de poliestireno. Estas figuras desfilan por la ciudad antes de ser quemadas el 19 de marzo en la cremà. Solo la falla favorita sobrevive a ser quemada y consigue llegar a formar parte de la exhibición del Museo Fallero. Durante esta semana, Valencia cobra vida con las fiestas callejeras, los conciertos y las competiciones de paella.


  • Feria de Valencia: durante esta feria se celebra todo lo bueno que tiene Valencia en el mes de julio. Esta feria incluye numerosas actividades, desde conciertos, a espectáculos y fuegos artificiales. Algunos de los eventos principales son: el Certamen de Bandas, un concurso internacional de bandas de música, las corridas de toros y la Batalla de Flores, que pone fin a la fiesta.


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